1. Cortar los calabacines por la mitad a lo largo. Con una cuchara, retirar la mayor parte de la pulpa del interior de los calabacines. Picar la pulpa y dejar en espera.
2. Precalentar el horno a 180°C.
3. En una sartén, calentar el aceite de oliva. Agregar la cebolla picada y cocinar durante 2 minutos. Agregar el cordero picado y cocinar durante 4 minutos.
4. Agregar la pulpa de calabacín picada. Sazonar con sal y pimienta. Agregar el comino, el perejil y el orégano. Mezclar bien.
5. Agregar el caldo de carne y llevar a ebullición. Cocinar hasta que el caldo se haya evaporado. Retirar del fuego.
6. Rellenar las cáscaras de calabacín con la mezcla de carne y calabacín. Cubrir con queso Gruyère rallado. Colocar en un plato para hornear.
7. Hornear durante 25 minutos. Retirar del horno y servir caliente.