Para los cupcakes:
Centrar la rejilla del horno en el medio y precalentar el horno a 350 F (180 C).
Forrar un molde para 12 cupcakes con liners de papel.

Combinar la harina, el cacao, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Reservar.

Batir la mantequilla y el azúcar hasta que estén suaves.
Agregar el huevo, luego la yema de huevo, mezclando bien entre cada adición, luego agregar la vainilla y mezclar.
Reducir la velocidad de la batidora eléctrica, luego incorporar los ingredientes secos reservados en alternancia con el buttermilk.
Incorporar el chocolate derretido y mezclar bien.

Dividir la masa en cada caja de muffin y hornear durante 22 a 25 minutos.
Dejar enfriar durante 5 minutos en el molde antes de transferir a una rejilla para enfriar completamente.

Para el glaseado:
Derretir el chocolate en un baño de agua, luego transferir el tazón al mostrador y dejar enfriar durante 5 minutos.
Usando un batidor, incorporar el azúcar en polvo, luego la mantequilla.
Dejar enfriar completamente antes de glasear los cupcakes.