1. Corta la parte superior de dos manzanas y reserva. Vacía las manzanas con una cuchara, dejando 1 cm de pulpa dentro.
2. Corta las otras dos manzanas en rodajas pequeñas. Coloca las rodajas de manzana en un tazón y mezcla con jugo de limón.
3. Pica las endibias, guardando algunas hojas para decorar. Desmenuza el queso azul con los dedos.
4. En un tazón, mezcla suavemente las rodajas de manzana escurridas, las endibias picadas, las rodajas de apio y el queso. Sazona con sal y pimienta.
5. Rellena las manzanas vacías con la mezcla. Decora con hojas de endibia.
6. Vuelve a colocar la parte superior de la manzana. Sirve frío.