1. Cortar el cordero en cubos grandes.

2. Pelar y cortar las cebollas en rodajas.

3. Picar los dientes de ajo pelados.

4. En una olla holandesa, a fuego moderado, dorar los cubos de cordero con 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen. Retirar la carne, desechar la grasa y limpiar la olla. Agregar 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen, las cebollas y el ajo. Cocinar, revolviendo, durante 5 minutos, luego agregar la miel y el cúrcuma. Dejar que las cebollas se caramelicen durante 10 minutos, luego regresar la carne a la olla.

5. Agregar suficiente agua caliente para cubrir. Agregar el cubo de caldo, la canela, el tomillo, la sal y la pimienta. Cubrir la olla y cocinar a fuego lento durante 70 minutos.

6. Retirar los cubos de carne con una cuchara escurridora.

7. Reducir la salsa a fuego alto a la mitad; regresar la carne a la salsa y agregar las ciruelas. Cubrir, continuar cocinando durante 20 minutos y servir en un plato de tajine caliente.